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El Mónaco tumba al Maccabi y alcanza la Final Four de la Euroliga (97-86)

Sébastien Gente
Mike James y el Mónaco ponen fin a 26 años de espera.
Mike James y el Mónaco ponen fin a 26 años de espera.AFP
26 años después del ASVEL, el Mónaco ha conseguido su objetivo. El equipo de la Roca estará en la Final Four de la Euroliga tras vencer en un asfixiante quinto partido al Maccabi de Tel Aviv, pero que se saldó con una gran alegría.

Era la gran noche para el Mónaco. Hacía 26 años que un club francés -el ASVEL, en este caso- no llegaba a la Final Four de la Euroliga. El equipo de la Roca contaba con la ventaja de probar suerte en casa, pero su rival, el Maccabi de Tel-Aviv, tenía mucha más experiencia en este tipo de encuentros. Los monegascos, que el año pasado perdieron en el quinto partido en el mismo pabellón, querían romper su techo de cristal.

En un ambiente de grandes noches en Gaston-Médecin, el Mónaco es eficaz en ataque pero flojo en defensa. Esto da al Maccabi la oportunidad de brillar en el perímetro. Pero son claramente los ataques los que toman la delantera, con un festival de tiros acertados por ambas partes. Es muy sencillo, ¡los israelíes no fallaron ni un solo tiro durante casi 8 minutos!

Pero en el otro lado de la cancha, Mike James se puso rápidamente las pilas. El estadounidense estuvo en todas partes y anotó 11 puntos en el primer cuarto, insuficientes para mantener la igualdad (26-33). El juego monegasco no está lo suficientemente pulido, pero todo cambia en el segundo cuarto, iniciado por un 15-0 de Roca, ¡incluido un monstruoso Mike James!

Pero la felicidad no dura, y el Maccabi vuelve rápidamente al partido. La lucha se reinicia, y cada equipo compite para mantenerse en cabeza. Es una secuencia final sobre la bocina de Yakuba Ouattara la que permite al Mónaco recuperar 4 puntos de ventaja al descanso (53-49).

La gran alegría

Y el inicio del tercer cuarto permite al Mónaco mantenerse en cabeza gracias a una buena eficacia defensiva. Sin embargo, falta un jugador para salir del atolladero y dar un relevo a Mike James. Muy esperado, Elie Okobo está en apuros. Pero Chima Moneke aporta su contribución en ambos lados de la cancha. El Maccabi permanece sin embargo pegado a los monegascos gracias sobre todo a una excepcional habilidad a larga distancia, simbolizada por el dúo Wade Baldwin IV - Lorenzo Brown.

Al final del tercer cuarto, el Mónaco lidera, pero el suspense está en su punto álgido (72-70). Sin embargo, el inicio del último cuarto se complica para la Roca, a causa de las sucesivas faltas que les ponen rápidamente en penalización. Las piernas pesan, los tiros no entran, pero la intensidad defensiva del Mónaco salva los muebles.

El partido se vuelve realmente trepidante en forma de "à toi, à moi". Los cambios de líder se suceden en lo que es un excelente partido de baloncesto. El cuarto se enciende con un triple de Jordan Loyd que pone al Mónaco a +4 a menos de 4 minutos para el final, el hombre de la segunda parte, que provoca una increíble cantidad de faltas. 86-79, 3 minutos.

Y la gestión al final del partido es ejemplar. Mónaco va a por las faltas cuando es necesario, y mete algunos tiros mágicos, sobre todo de un redescubierto Okobo. Un último y uno de Alpha Diallo dobla el caso, y permite a Gaston-Médecin exultar finalmente. Mónaco gana 97-86 y estará en la Final Four. El final de una larga espera para el baloncesto francés, pero sobre todo, el logro de un equipo entregado a esta meta, que podrá acercarse a la Final Four sin presión, con el objetivo de prolongar el sueño.