Tal y como se esperaba después de haber alcanzado varias semanas atrás un principio de acuerdo, el pívot congoleño con pasaporte español reforzará la pintura del equipo entrenado por Chus Mateo, que había perdido a Vincent Poirier, que firmó con el Anadolu Efes como 'primer espada'.
Ahora, con un físico no tan explosivo como antaño, pero con mejores prestaciones ofensivas y lectura del juego, Ibaka formará pareja de pívots con Tavares, a la espera de la confirmación de otro regreso, el del también internacional español Usman Garuba.
"Me siento feliz y también muy agradecido de volver al Madrid. Para mí es como volver a casa. Es un club que conozco y fue fácil tomar esta decisión", ha comentado tras el anuncio oficial de su fichaje.
Ibaka es consciente de que "físicamente he cambiado, pero en el nivel como jugador he mejorado muchísimo. Esa es la diferencia entre el Ibaka de ahora y el de antes. Mi labor siempre ha sido defensiva, desde el principio de mi carrera, pero ahora he mejorado mucho en ataque. Puedo aportar también mi experiencia, porque llevo jugando baloncesto profesional desde hace 18 años".
Y ahí considera que la puede 'liar' con Tavares. "Con la mentalidad defensiva que tiene y que yo también tengo podemos formar una pareja muy importante y fuerte en Europa a nivel defensivo".
Trayectoria de Ibaka
14 campañas estuvo en la NBA desde que fue drafteado por los extintos Seattle Supersonics (trasladados a Oklahoma como Thunder), con el que fue mejor taponador de la liga en dos ocasiones (2011-2012 y 2012-2013) y en la que formó parte tres veces del mejor quinteto defensivo (2011-2012, 2012-2013 y 2013-2014).
Después, llegaría a vestir la camiseta de los Magic, que los traspasaron meses después de Toronto. Su cénit lo alcanzó allí junto a Marc Gasol y con Sergio Scariolo de entrenador ayudante en 2019 cuando los Raptors sumaron su primer y único anillo de campeón.
Clippers, Bucks y Pacers fueron sus últimas franquicias en Estados Unidos antes de volver a Europa para ponerse a las órdenes de Pablo Laso en su proyecto, ya acabado, en Múnich. Allí ha promediado en 21 minutos de acción en la liga 10.3 puntos, 5.6 rebotes y 1.7 asistencias. En la Euroliga, esas medias fueron de 12.6 puntos, 6.8 rebotes y 1.2 asistencias en 24.7 minutos.
Ibaka, con la selección española, logró la medalla de oro en el Europeo de Lituania en 2011 y la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012.