Brasil empieza su camino hacia la sexta estrella contra la valorada Serbia
La labor ante un rival conocido, al que vencieron 2-0 en la fase de grupos de Rusia (2018), no parece fácil: los serbios cargan en su mochila el haber enviado a la repesca al Portugal de Cristiano Ronaldo.
Y con el precedente del batacazo de Arabia Saudita sobre la Argentina de Lionel Messi (2-1) el martes, no hay margen para confiarse el jueves en el estadio de Lusail (22h00 locales, 20h00 CET).
Sin embargo, la 'Seleção' de Tite se ha ganado a pulso el mote de favorito para ganar el trofeo, luego de dominar el clasificatorio sudamericano y arrastrar una imbatibilidad de 15 partidos (12 victorias, siete de ellas en línea, y tres empates).
"Pasamos por momentos difíciles, pero los superamos. Dolió mucho perder los mundiales de 2014 y 2018, pero ahora llegó nuestra oportunidad. Tenemos un muy buen equipo, vamos a batallar por el título", aseguró el atacante Richarlison.
Tras la estela de Pelé
La carta principal para alzar el sexto título mundial, el primero desde 2002, ganado por Ronaldo y compañía, lleva el '10' en su espalda.
A sus 30 años, 'Ney' llega en gran forma a su tercer Mundial (Brasil y Rusia) tras un encumbrado comienzo de temporada en el Paris Saint Germain. Y con la esperanza de que, por fin, la Copa del Mundo le corresponda el amor que el crack tantas veces le ha profesado.
"Él es un jugador distinto, una gran estrella. Hoy en la selección brasileña tiene compañeros para que lo ayuden, la responsabilidad no está encima solamente de él. Y eso es bueno, puede brillar más", dijo a AFP el exmediocampista brasileño Zinho, campeón en Estados Unidos (1994).
Además de bañarse con la gloria más valiosa del fútbol, de conquistar Catar, el astro puede posicionarse como candidato firme al esquivo Balón de Oro, otro de sus grandes anhelos.
Y si mantiene la racha anotadora que exhibió en el clasificatorio, donde fue el segundo máximo goleador (8), por detrás del boliviano Marcelo Moreno (10), puede superar a Pelé como el mayor artillero de Brasil.
'O rei', único tricampeón mundial (1958, 1962, 1970), festejó 77 veces contra selecciones, dos veces más que su pupilo.
"Las sorpresas son posibles"
Para el propósito de desbancar a Pelé, quien reivindica 18 dianas más, anotadas en amistosos frente a clubes, Neymar cuenta con el apoyo de una camada ofensiva envidiable: Richarlison, Vinicius Jr, Antony, Rodrygo, Raphinha y Lucas Paquetá.
A la llamada sangre nueva se suman pesos pesados en la zaga: Alisson, Ederson, Marquinhos, Thiago Silva, Dani Alves y Casemiro.
Aunque muestra solidez y regularidad de manual, el 'scratch' de Tite arrastra fantasmas que aumentan la presión sobre una selección que solo admite vencer: dos décadas de sequía mundialista, el humillante 7-1 ante Alemania en semifinales de Brasil-2014 y la derrota ante Argentina en la final de la Copa América, nada menos que en el Maracaná.
"Cargamos con la presión (de querer alzar la copa)", explicó Raphinha. "Para llegar a la final, tenemos que ir partido a partido".
Serbia amenaza con hacerles daño a los pentacampeones, en especial tras recuperar de lesiones a la letal dupla ofensiva formada por Aleksandar Mitrovic y Dusan Vlahovic, autores de 19 de los 31 goles (61%) marcados por las 'Águilas' en la Eurocopa y la Liga de Naciones.
Y además de contar con otros hombres peligrosos como Dusan Tadic y Luka Jovic, los serbios de Dragan Stojkovic se envalentonaron con el ejemplo saudita.
"Ese partido es una muestra de por qué el fútbol es bonito y de que las sorpresas son posibles", dijo el volante Filip Djuricic. "Los brasileños tienen defectos, sabemos cuáles son", añadió.
Todos los detalles del partido, con las mejores imágenes y audiocomentarios, en el siguiente enlace: Brasil-Serbia.