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Un inmenso Vingegaard aplasta a Pogacar, vence en la contrarreloj y acaricia el Tour

Increíble Jonas Vingegaard
Increíble Jonas VingegaardAFP
El duelo previsto se convirtió en un espectáculo individual. Superior desde la primera pedalada, Jonas Vingegaard hizo picadillo a Tadej Pogacar, ganó la contrarreloj y asestó un golpe a la victoria en la general.

Así llegó el momento de la única contrarreloj de esta edición 2023 del Tour de Francia. Un ejercicio de 22,4 km que culminaba con la ascensión a la famosa côte de Domancy, tan querida por Bernard Hinault. Por supuesto, parte del duelo entre el maillot amarillo Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma) y el segundo clasificado Tadej Pogacar (UAE Emirates) debía disputarse este martes. 

Pero mientras esperaban a los líderes, el resto del pelotón lo pasó mal en esta singular subida. Y el primero en marcar un tiempo de referencia real no fue necesariamente el más esperado. Mads Pedersen (Lidl-Trek) cruzó la línea en un sorprendente tiempo de 36.07, antes de que el campeón francés Rémi Cavagna (Soudal-QuickStep) estableciera el récord (35.42).

Los especialistas puros, como Stefan Küng (Groupama-FDJ), pero también algunos de los que se pensaba que podían brillar en este tipo de perfil, como Mattias Skjelmose Jensen (Lidl-Trek), se rompieron los dientes, hasta tal punto que se pensaba que el tricolor era capaz de terminar entre los 10 primeros, o incluso mejor. Hará falta nada menos que Wout Van Aert (Jumbo-Visma) para desbancarle en 35.27.

Pero, por supuesto, el duelo entre las dos estrellas monopolizaría la atención. Y desde el principio, Vingegaard se puso en modo cohete: ¡31 segundos por delante de Pogacar al pie de la subida! El esloveno daba una buena impresión, pero se quedaba corto. Lo apostó todo al cambio de bicicleta al pie de la subida de Domancy, que estaba programado, al contrario que el danés.

Pero este juego de manos no cambió nada, y Jonas Vingegaard convirtió la etapa en una auténtica demostración, llegando incluso a estar cerca de alcanzar a su rival, que había salido 2 minutos por delante de él. Al final, ganó por un margen de 1 minuto y 38 segundos sobre su rival esloveno. Una actuación asombrosa que le permitió asegurarse el maillot amarillo. ¿Ha cambiado hoy el Tour? Puede que sí. Pero si la diferencia actual en la clasificación general (1 minuto 48) no es irremediable, es sobre todo psicológicamente que Tadej Pogacar se llevó una gran bofetada.