En Ciudad de México, donde se disputará la 19ª prueba de las 22 de la temporada, el holandés puede conseguir su 16º éxito y mejorar así su marca de 15 victorias establecida el año pasado e igualada el pasado fin de semana en Estados Unidos.

El insaciable Verstappen también puede convertirse en el cuarto piloto más ganador de la historia de la F1 empatado con el francés Alain Prost si consigue su 51º éxito. También se acercaría al tercero, el alemán Sebastian Vettel (53 victorias). Sin embargo, aún está lejos de las 103 victorias del británico Lewis Hamilton, aún en activo, y de las 91 del alemán Michael Schumacher.

"El circuito de Ciudad de México es el más alto de la temporada y eso lo hace más exigente para los coches, pero el RB19 se ha mostrado impecable sean cuales sean las condiciones, así que debería rendir bien. Maximizaremos nuestros puntos fuertes con el objetivo de seguir ganando", dijo el piloto de 26 años.

Su compañero de equipo, Sergio Pérez será esperado con impaciencia en casa, unos días después de beneficiarse de la descalificación del británico Lewis Hamilton (Mercedes) en Austin y firmar un cuarto puesto.

El siete veces campeón del mundo, que había terminado segundo y reducido la distancia con el mexicano a 19 puntos en la lucha por el segundo puesto del campeonato, fue finalmente descalificado por los comisarios debido a un desgaste excesivo del suelo de su coche y se encuentra ahora a 39 puntos de Pérez.

Hamilton, entre la espada y la pared

"Hemos progresado, aunque en Austin no lo demostramos lo suficiente por culpa de algunos reglajes deficientes. Soy optimista para este fin de semana porque sé en qué dirección tenemos que ir", subraya Pérez, que ya ha terminado tercero dos veces en México.

Para que Hamilton tenga alguna esperanza de terminar segundo tras Verstappen, tendrá que destacar en el Autódromo Hermanos Rodríguez, situado a más de 2.200 metros de altitud. El británico, que tuvo una gran actuación en Texas el pasado fin de semana y no ha logrado puntuar en sus dos últimos Grandes Premios, querrá confirmar los progresos de su Flecha de Plata.

"Tuvimos sentimientos encontrados después de Austin porque los cambios que hicimos en el coche parecían mejorar nuestro rendimiento. Teníamos buen ritmo y podíamos luchar por la victoria. Pero, por desgracia, no pudimos capitalizarlo con un buen resultado", explicó el jefe de Mercedes, Toto Wolff.

El equipo McLaren también será muy esperado en México tras sus magníficas actuaciones de las últimas semanas. "Austin fue un fin de semana muy bueno, fue genial conseguir mi cuarto podio consecutivo en mi Gran Premio número 100. Hemos progresado mucho en los dos últimos meses y seguiremos esforzándonos al máximo para sumar puntos", reconoció el británico Lando Norris.

Ferrari, sin margen de error

Ferrari, que también vio cómo uno de sus coches era descalificado en Texas, el del monegasco Charles Leclerc, estará bajo presión en México. La escudería italiana, a 22 puntos de Mercedes en la lucha por el segundo puesto del campeonato de constructores, no tiene margen de error.

"En México quiero ver a un equipo más concentrado porque no podemos permitirnos hacer las cosas mal en términos de gestión de carrera, como ocurrió en Austin. Sobre el papel, puede ser una carrera complicada, por lo que tendremos que aprovechar todas las oportunidades que se nos presenten", dijo el jefe de la Scuderia, Frédéric Vasseur.

Por parte francesa, Alpine, que ha puntuado en seis de las últimas siete carreras, intentará continuar con el cambio de tendencia desde que el equipo se reestructuró este verano. "La pista es agradable y la altitud transforma completamente las sensaciones. Cambia el comportamiento del coche, con mucho menos agarre y una carrera más exigente físicamente. Estamos listos para afrontar el reto y esperamos tener un fin de semana sólido", dijo el francés Esteban Ocon.