El hombre que chocó el puño con Kipchoge en Tokio 2020 se desplomó en Nueva York

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad
Publicidad

El hombre que chocó el puño con Kipchoge en Tokio 2020 se desplomó en Nueva York

Daniel do Nascimento durante el Maratón de Nueva York.
Daniel do Nascimento durante el Maratón de Nueva York.Profimedia
Daniel Ferreira do Nascimento (24) ganó cierta popularidad después de chocar el puño con Eliud Kipchoge (38) en plena maratón de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. El brasileño le enseñó al africano una pulsera con la bandera de Kenia junto a la de Brasil y al plusmarquista le resultó gracioso. Ahora, ha vuelto a ser noticia por su particular maratón de Nueva York, en el que no consiguió terminar por un colapso a los 32 kilómetros.

Antes de tomar a Nascimento como un meme, cabe indicar que cuenta con la mejor marca en maratón de un atleta masculino no africano. Lo consiguió en Seúl este mismo año parando el crono en 2:04:51. Tiempo estratosférico que queda ensombrecido por las actuaciones extraterrestres de kenianos y etíopes.

Pese a su gran precedente en la prueba asiática, podemos decir que el brasileño pecó de exceso de confianza en Nueva York. Su estrategia de carrera fue la de un kamikaze y lo terminó pagando. Durante varios kilómetros marchó a 2:52 minutos/kilómetro, lo que arrojaba una marca estimada de menos de dos horas y dos minutos en meta, casi codeándose con el récord del mundo de su ídolo Kipchoge.

Sin embargo, el atleta de Sao Paulo no pudo aguantar el esfuerzo extremo y colapsó en el kilómetro 32 del circuito, retirándose automáticamente de la carrera. La táctica empleada tenía todo para salir mal, puesto que el récord neoyorquino lo fijó Geoffrey Mutai (41) en 2:05:06 en la edición de 2011.

Pero no solo quedará en el recuerdo de la gente este maratón de do Nascimento por su debacle deportiva. También protagonizó la anécdota curiosa de la mañana cuando tuvo que detenerse para entrar al baño mientras encabezaba la prueba.

El ímpetu de la juventud

No es la primera vez que su fuerza de voluntad le juega una mala pasada. En el ya mencionado maratón de Tokio, en 2021, tras saludar a su ídolo Eliud Kipchoge, también terminó desvaneciéndose antes de tiempo por seguir un ritmo superior al que su cuerpo estaba preparado para soportar.

Esta falta de capacidad para guardarse puede venir dada por su juventud. Solo tiene 24 primaveras. Talento tiene de sobra para seguir mejorando, seguro que a medida que vaya adquiriendo experiencia dejaremos de verle en situaciones tan comprometidas como la que vivió en el último Major del 2022.