El lesionado Neymar recibe numerosos mensajes de odio por aficionados brasileños
Pero incluso mientras esperaban angustiados para que un Brasil sin Neymar convirtiera ante Suiza el lunes (duelo que terminó con triunfo de la 'canarinha' 1-0), algunos brasileños se sintieron contrariados al echarlo de menos, porque la superestrella prometió dedicar su primer gol en la Copa del Mundo al presidente ultraderechista Jair Bolsonaro.
El estudiante de Derecho Henrique Melo, de 23 años, explicó su dilema, mientras veía el partido en un bar repleto del centro de Rio de Janeiro.
"El equipo lo extraña", dijo Melo, luciendo con orgullo la camiseta de Brasil, rodeado de fanáticos que, como él, esperaban nerviosos por el que resultó ser el único gol del partido, anotado en el minuto 83 por Casemiro.
Como aficionado al fútbol, quería desesperadamente que Neymar se recuperara de la lesión de tobillo durante el debut victorioso de Brasil ante Serbia el jueves (2-0).
Al mismo tiempo, cree que el hecho de que el futbolista más caro del mundo aún no haya marcado en el torneo "es el mejor resultado de Brasil en la Copa del Mundo".
"Hubiésemos tenido a todos estos simpatizantes de Bolsonaro celebrando", dijo a la AFP Melo, un ferviente seguidor del presidente electo de izquierda, Luiz Inácio Lula da Silva.
"Como jugador, Neymar es increíble, es un artista. Como persona, deja mucho que desear", agregó Melo.
En la icónica playa de Copacabana de Rio, donde una gran multitud vio el partido en una pantalla gigante, la vendedora Tainara Santana, de 29 años, estaba sintiendo la misma disyuntiva.
"Me gusta el fútbol, así que quiero que (Neymar) juegue porque es bueno. Pero no puedo decir que estoy triste porque no ha marcado. Es genial verlo fallar", se rió.
Con millones seguidores en las redes sociales, Neymar es uno de los nombres más importantes del deporte.
Pero su magia futbolística se ha visto empañada en ocasiones.
En la cancha, los críticos acusan a la estrella del Paris Saint-Germain de 30 años de simular faltas tirándose excesivamente al suelo, y no estar a la altura de las expectativas en momentos decisivos.
Fuera de la cancha, ha sido acusado de salir mucho de fiesta, de cometer fraude fiscal y mala conducta.
"Es un imbécil", dijo Santana.
"No solo por su postura política, me parece machista, egoísta, no tiene ni un poco de humildad", consideró.
"¿Qué tan bajo caímos?"
La campaña de Brasil para obtener su sexta Copa del Mundo llega inmediatamente después de las polarizadas elecciones de octubre pasado.
Neymar respaldó a Bolsonaro contra Lula y se convirtió en blanco de un ejército de haters de Neymar en las redes.
El fin de semana, "Que se joda Neymar" se convirtió en una de las principales tendencias en Brasil en Twitter.
La leyenda del fútbol brasileño Ronaldo se apresuró a defender a Neymar el domingo. "¡Eres fantástico Neymar! ¡Gigante!" escribió el dos veces ganador de la Copa del Mundo en Instagram el domingo.
"Por eso tienes que lidiar con tanta envidia y maldad, a tal punto de que la gente celebra tu lesión. ¿Qué tan bajo hemos caído?" dijo, instando a Neymar a "usar ese odio como combustible".
Los compañeros de equipo Casemiro y Raphinha también defendieron a Neymar, diciendo que no se merecía los agravios virtuales que estaba recibiendo.
Brasil ha tenido problemas en el pasado sin Neymar, en particular soportando la vergüenza de su eliminación por 7-1 ante Alemania en casa en las semifinales de la Copa del Mundo de 2014 después de que su talismán sufriera una lesión en la espalda.
En Copacabana, Charleo Luis, seguidor de Lula, prefería mantener la política y el fútbol separados.
Los haters de Neymar "son idiotas que no saben nada de fútbol", dijo el vendedor ambulante de 24 años.
"¿A quién le importa si apoya a Bolsonaro? Es un gran jugador. Soy un gran admirador, desde niño. Le envío fuerza para que se recupere".
La Copa del Mundo, agregó, "es un momento para animar a Brasil juntos, como una gran familia".