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El Madrid da un golpe en la mesa y recupera el liderato al llevarse el Clásico (3-1)

Denis García
Los blancos fueron muy superiores aunque sufrieron antes de sentenciar el Clásico.
Los blancos fueron muy superiores aunque sufrieron antes de sentenciar el Clásico.Profimedia
El Real Madrid se llevó el Clásico al vencer al Fútbol Club Barcelona por 3-1. Los blancos, con un Valverde espectacular, fueron muy superiores a los azulgranas, pero su propia relajación les hizo bajar el pistón y permitir que sus adversarios pudieran empatar en la segunda parte hasta que un postrero gol de penalti de Rodrygo hizo justicia con lo vivido sobre el terreno de juego. El equipo de Carlo Ancelotti vuelve a ser líder de LaLiga Santander y deja muy tocado al Barça de Xavi, que en cuestión de menos de una semana ha visto cómo se le ha complicado la temporada tanto en la Champions League como en el campeonato liguero.

El Madrid de las grandes ocasiones se volvió a ver para ponerse líder de LaLiga de nuevo y dejar al Barça en un mar de dudas con una alarmante crisis tanto de juego como de resultados.

Ancelotti había avisado el sábado de que no tenía pensado innovar en El Clásico, algo que le salió caro la temporada pasada y que tuvo como resultado el 0-4 del Barça. No lo hizo en cuanto a la alineación, pero sí en cuanto a la manera de atacar, puesto que en el primer tiempo cargó más el juego por su banda derecha, algo poco habitual en los últimos tiempos, para intentar dañar al joven Balde entre Carvajal y Valverde.

Benzema le ganó la batalla a Lewandowski

Pero, aunque este domingo no se viera su mejor versión, el principal peligro del Real Madrid es brasileño y juega de extremo izquierdo. A pesar de ello, Xavi creyó que bastaría con Sergi Roberto defendiendo a Vinícus Jr. (22) en el puesto de lateral derecho de la zaga azulgrana, y poco tardó el Real Madrid en castigar esa osadía. En el minuto 11, Kroos aguantó el balón pacientemente ante la presión de Busquets a la espera de la arrancada de su compañero, que no tardó en producirse. El carioca dejó atrás a su par con una facilidad pasmosa y se plantó delante de un Ter Stegen que llevaba imbatido 624 minutos en el campeonato doméstico antes de llegar al Bernabéu. El alemán detuvo el mano a mano, pero el rebote le cayó a Karim Benzema (34) y no perdonó el 1-0.

El francés llevaba cinco partidos sin anotar desde su doblete al Espanyol el 28 de agosto, pero apareció en el día D y la hora H para demostrarle a su homólogo Robert Lewandowski (34) y al resto del mundo quién se tiene que hacer con el próximo Balón de Oro.

No fue hasta mediada la primera parte cuando el Barcelona pudo comenzar a hilvanar posesiones largas en el campo rival, aunque su falta de profundidad no les permitía crear peligro. Por este motivo, la idea de los culés empezó a ser llevar el balón a las bandas para tratar de ponerle algún centro a su delantero centro polaco.

En el 25 llegó el primer gran susto de los visitantes. Raphinha controló un balón dentro del área y se lo puso a Lewandowski para empujar en el área pequeña, pero el máximo goleador de LaLiga falló sorprendentemente por encima del larguero, aunque parecía que se encontraba en posición de fuera de juego. Lejos de desanimar a los de Xavi, poco después otro ataque por la derecha azulgrana acabó con un cabezazo de Dembélé que pudo penalizar la mala salida de un Lunin que jugaba su primer Clásico ante la ausencia de Courtois por lesión.

Valverde volvió a ser determinante

Lo estaba pasando mal el Madrid, que perdió el dominio del partido con el que había contado al principio, o quizás era todo parte del plan. Hasta que un halcón aterrizó en el campo. Tal y como avisábamos en la previa del encuentro, Federico Valverde (24) se había convertido en el arma secreta de Ancelotti en este tipo de encuentros a cara de perro y, de nuevo, no decepcionó a su entrenador. Un fallo de Eric García acabó con el balón en los pies de Vinícius cerca del área. Esperó a que Mendy llegara por la izquierda para combinar con el galo y este vio aparecer en la frontal al uruguayo, que se sacó un tiro raso y seco que entró pegado al palo de la portería culé para júbilo de la parroquia merengue.

El Barcelona quedó noqueado y así se fue al descanso, aunque estuvo cerca de besar la lona definitivamente al poco de reanudarse el choque. Un bonito gol de Benzema fue anulado por fuera de juego previo, lo que permitió a Xavi respirar y pensar sobre qué podía hacer para atravesar el muro blanco. Su idea fue dar entrada a Jordi Alba, Ferran Torres y Gavi en sustitución de Balde, Raphinha y Busquets para que De Jong se colocara como mediocentro y Dembélé pasara a la banda derecha, la posición donde suele crear más peligro. Pero el francés acostumbra a ser una moneda al aire y ante el Madrid salió cruz, por lo que Ansu Fati (19) entró en su lugar poco después y acabaría siendo el mejor de los visitantes.

Hasta entonces, el Real Madrid se encontraba muy cómodo regalándole la posesión del balón a los azulgranas y esperando atrás a la espera de poder contraatacar con espacios abiertos a pesar de que su afición le reclamaba que le diera la estocada mortal al Barça.

Un partido como El Clásico no podía terminar sin su dosis de polémica. En el minuto 73, Lewandowski entró en el área y pareció haber sido derribado por Carvajal. El árbitro Sánchez Martínez tuvo claro en todo momento que no había sido penalti y la repetición le dio la razón. Lo mejor para un árbitro en un encuentro así es pasar desapercibido y así fue con el murciano.

Ansu Fati le cambió la cara al Barça

Fati pareció volver a ser el que era antes de sus lesiones y, con el Madrid relajado, fue quien más peligro creó para los de Xavi en todo el Clásico. De una galopada suya por la izquierda dejando atrás a Valverde consiguió su equipo reducir distancias en el marcador. El español envió el balón al área pequeña, Lewandowski no acertó con su taconazo, pero Ferran Torres apareció por detrás para empujar a gol y poner el miedo en el ambiente. Un miedo que pudo ser terror, ya que el canterano tuvó un remate acrobático en el 86 que se escapó por muy poco y que le habría convertido en héroe por un día. 

Con al Barça volcado buscando el empate, Valverde volvió a dar una muestra de su físico explosivo. Una carrera de campo a campo del charrúa sirvió para que el balón llegara a Rodrygo (21), que acaba de entrar en el terreno de juego sustituyendo a Vinícius. Recortó a Eric García, que le pisó y el VAR tuvo que aparecer en escena para avisar al colegiado de que pitara penalti. El propio brasileño tuvo la valentía de lanzarlo para poner el 3-1 definitivo en el electrónico y plasmar la realidad del encuentro.

Como decimos, el Real Madrid vuelve a liderar LaLiga Santander con tres puntos de diferencia sobre el Barcelona. Los blancos visitarán este miércoles el Martínez Valero para enfrentarse al Elche, colista de la competición. Por su parte, el Barça recibirá el jueves al Villarreal en el Camp Nou para tratar de olvidar sus penas, que últimamente no están siendo pocas.

 

Jugador Flashscore del partido: Valverde.

 

Aquí tienes todas las estadísticas del Real Madrid-Barcelona.