Varios equipos se aventuraron entonces a llamar a los 49ers, pero según Adam Schefter de ESPN, el equipo no quiere deshacerse en absoluto de uno de sus jugadores estrella en ataque. En poco menos de una semana comienza el campamento de entrenamiento del equipo de cara a la nueva temporada.
Aiyuk todavía tiene un contrato de un año, que sigue siendo el que logró como novato. Por lo tanto, es el momento de asegurar su futuro financiero. Además, no cabe duda de que a él también le han llegado los otros megacontratos para receptores abiertos de la NFL. Entre otros, Amon-Ra St. Brown (Detroit Lions), A.J. Brown (Philadelphia Eagles) y Jaylen Waddle (Miami Dolphins) firmaron lucrativos acuerdos.
Deebo Samuel
La situación recuerda en cierto modo a la del receptor Deebo Samuel en 2022. Él también pidió a los 49ers un traspaso durante la temporada baja, pero finalmente firmó un contrato de tres años por valor de 73,5 millones de dólares (67,2 millones de euros) el 31 de julio de ese año.
Aiyuk tuvo una temporada de primera con 75 recepciones para 1342 yardas y siete touchdowns. Los 49ers perdieron la Super Bowl contra los Kansas City Chiefs la temporada pasada. San Francisco volverá a ser uno de los mejores equipos de la NFC la próxima temporada. El equipo jugará tres partidos de entrenamiento en agosto y abrirá la temporada regular a principios de septiembre con un partido en casa el Monday Night Football contra los New York Jets.