¿Conoces la historia de la celebración de Brahim Díaz? Es la historia de un chaval de un barrio de Málaga que soñaba con convertirse en futbolista profesional. Una meta que consiguió. Y allí, con los brazos extendidos y los ojos perplejos, el talentoso jugador difunde la idea de que el trabajo duro y el sacrificio hacen posible lo imposible. Una filosofía de vida estrechamente ligada a la victoria, que el Real Madrid se esfuerza por seguir año tras año.
En Wembley, el club español conquistó su 15ª Liga de Campeones, después de haberse adjudicado el trofeo doméstico a principios de mayo y la Supercopa de España en enero. Un triplete que subraya el trabajo de una plantilla de 25 jugadores, en la que desde el titular indiscutible hasta los jugadores que han subido con el Castilla han aportado su granito de arena.
Brahim, por su parte, se limitó -felizmente- al papel de recambio, dispuesto a darlo todo en cuanto Carletto le diera la oportunidad. Una misión que cumplió brillantemente, hasta el punto de que podría haberle arrebatado la titularidad a Rodrygo.
¿A por el Balón de Oro africano?
Pero la jerarquía establecida por la filosofía de Carlo Ancelotti se lo impidió. Sin embargo, el atrevido jugador ha sabido aprovechar su titularidad durante la temporada y las diversas lesiones de sus compañeros.
Auténtica amenaza ofensiva cuando toca el balón, el marroquí ha marcado 12 goles y dado nueve asistencias en 44 partidos disputados. Una incorporación muy necesaria para el equipo tras la marcha de Marco Asensio al PSG. El Madrid necesitaba reencontrar a ese 'jugador de impacto' desde el banquillo, un rol que el balear ya no desempeñaba.
Un simple dato para ilustrarlo: acabó la Liga como el jugador con más ocasiones creadas para su equipo por cada 90 minutos jugados (1,05). Tras él, Nico Williams (0,95) y Raphinha (0,86). Además, es el tercer jugador de la plantilla que más MVP ha ganado en la Liga (seis). Por otro lado, es el jugador más joven de la historia que ha ganado los tres grandes campeonatos europeos (Premier League, LaLiga y Serie A): cumplirá 25 años el 3 de agosto.
En este largo y duro camino hasta levantar la 15ᵉ Champions League en Wembley, un gol de Brahim quedará en el imaginario de los aficionados merengues: su tanto en el Red Bull Arena ante el Leipzig en octavos de final. Fue un fantástico chicharro que toda escuela de fútbol debería ver una y otra vez.
Hay muchos argumentos a favor de Brahim Díaz a la hora de optar al próximo Balón de Oro africano, un trofeo que ganó Osimhen la temporada pasada por proclamarse campeón de la Serie A. Sería la primera vez que lo gana un jugador del Madrid.
Ahora se le espera con su selección, con la cual se concentrará este lunes. Estos últimos seguirán buscando el billete para el próximo Mundial, midiéndose en este parón a Zambia (07/06) y Congo (11/06).