El primer tiempo puede definirse en una paradoja. República Checa ha hecho todo lo posible para adelantarse en el marcador. Sin embargo, Mamardashvilli, guardameta georgiano del Valencia, se vistió de héroe y evitó varias acciones de gol de los checos. En el final del primer tiempo, una mano ingenua fue revisada por el VAR. El colegiado decretó penalti y Georges Mikautadze abrió la lata para Georgia.
En sí, los 30’ iniciales han sido dominados a placer por los checos. Tras la primera media hora de partido, el equipo de Karel Rada bajó la intensidad y en una acción aislada sufrió un golpe inesperado. En el final del primer tiempo, una mano fue revisada por el VAR. El colegiado decretó penalti y Georges Mikautadze abrió la lata para Georgia.
Schick pone las tablas
La República Checa se encontró con el anhelado empate en una acción a balón parado. Patrick Schick, uno de los referentes de su selección y del Bayer Leverkusen, reciente campeón de la Bundesliga y de la Copa Alemana, se encargó de firmar las tablas y de definir una acción a balón parado con un remate a un toque que no pudo evitar Mamardashvilli.
Como era de esperarse, República Checa mantuvo el ritmo que mostró en la segunda parte. La potencia y la intensidad seguían como patentes del juego de los de Rada. Georgia, un equipo reconocido por la potencia y velocidad de sus bandas, prefirió resguardarse en su área y esperar un espacio del rival.
Schick, héroe y autor del empate, se retiró con problemas físicos en el 67'. Rada envió a Chytil, delantero del Slavia Praga. La salida del jugador del Bayer Leverkusen afectó a los checos. Su capacidad ofensiva se redujo y Georgia, con tranquilidad, empezó a tomar aire en los últimos 20' de partido.
El cansancio le pasó factura a ambos equipos. De un lado, Kvaratskhelia ya no atacaba las espaldas de los checos. Del otro, las opciones ofensivas se reducían a acciones directas o a jugadas a balón parado. Georgia parecía tranquila con el empate. República Checa, en cambio, presionaba más por la victoria.
En el tramo final, Georgia se dedicó a resguardarse y, en una contra que dejó a tres delanteros georgianos solos, han dejado escapar la última jugada del partido.