Esta es, como han indicado desde Argentina y también lo ha hecho Fabrizio Romano, de 75 millones de euros fijos más otros 20 en variables. Una cantidad importante que obligará al Atlético a conseguir ingresos extras para poder llevar a cabo la operación.
Porque la entidad rojiblanca ya se ha gastado este verano 34,5 millones de euros, más otros cinco en bonus, en Le Normand, además de otros 35 en Alexander Sorloth. Por no hablar de otros 40 millones que pueden invertir en Gallagher. Y aunque han recibido unos 12 millones limpios por Morata y tienen más margen en el límite salarial por la ampliación de capital de 70,7, no es suficiente para afrontar la operación de la Araña argentina.
Las opciones pasan por vender al internacional olímpico Samu Omorodion, por el que el Chelsea suspira desde hace tiempo, y a Joao Félix, por el que el Atlético de Madrid querría sacar, al menos, 50 millones de euros.
Lo que está claro es que el fichaje de Julián Álvarez es prioritario para Simeone, y que el club está dispuesto a 'sacrificar' piezas para poder darle ese deseo.