Son las consecuencias de hacerlo bien, que corres el riesgo de perder a tus mejores hombres. Es ley de vida. El ejemplo más próximo lo tenemos en el Girona, que ha vendido a Aleix García, no ha podido retener a Eric García ni a Savinho, y está a punto de perder también a su máximo goleador, Dovbyk.
En LaLiga hay otro caso similar, el de la Real Sociedad. Aún no se ha desprendido de ninguno de sus internacionales, pero todo está encaminado para que, como en el caso del delantero ucraniano, sea el Atlético de Madrid el que termine fichando a Le Normand. Dejará una buena cantidad de millones, pero a veces eso no es suficiente para llenar el vacío que puede dejar una salida así.
Puede no ser la única. En Japón se habla y no se para del interés del Manchester United por Take Kubo. Su libertad vale 60 millones de euros. Por Mikel Merino están detrás el Arsenal, el Barça y también durante algún momento, aunque con menos fuerza, el Atlético pensó en él como refuerzo.
Incluso Zubimendi, que sigue estando en el radar del Barcelona, que busca un pivote defensivo por orden de Hansi Flick, y también ha sonado para el Manchester United, está en el candelero. Por fortuna, se cuenta con su arraigo en San Sebastián para retenerlo en caso de que aparezca algún club dispuesto a tirar la casa por la ventana por él o por cualquier otro campeón de Europa.
De momento, la Real resiste, pero ¿hasta cuándo será capaz?