"Hay tres escenarios sobre la mesa, entre ellos la liquidación y la desaparición del club", advirtió el empresario hispano-luxemburgués, de quien no se espera que reinvierta para compensar el déficit de 42 millones de euros necesarios para regresar a segunda división.
Mudo desde octubre, Gérard López eligió la AFP para romper su silencio.
Tras obtener un aplazamiento del procedimiento por parte de la DNCG, organismo de control financiero del fútbol francés, el 27 de junio. El Girondins descendió provisionalmente a la National (tercera división). Debían cuadrar las cuentas, tener garantías financieras y demostrarlo el nueve de julio, pero no lo consiguieron.
Ese mismo día hubo esperanzas por la presencia, junto a sus directivos, de representantes de Fenway Sports Group (FSG), propietarios del Liverpool (Premier League) e interesados en convertirse en socio mayoritario del club.
Desde entonces, sin embargo, las conversaciones con FSG se han roto, estancadas por "dos cuestiones clave", según López. "En primer lugar, los gastos de funcionamiento del club y especialmente del estadio, entre el alquiler anual y los atrasos (estimados en 42,5 millones de euros). Luego está el segundo aspecto, el más catastrófico para nosotros: la no decisión sobre los derechos de televisión".
"El fútbol francés acaba de recibir una bofetada, y nosotros estamos en primera línea porque, en términos de calendario, estábamos en negociaciones con gente para la que era importante. Así que el FSG se retiró", lamentó.
A sólo cinco días del comité de apelación de la DNCG, hay tres escenarios sobre la mesa. "No quiero dar falsas esperanzas. Estamos trabajando en los tres", admitió el presidente del Girondins, que ya ha invertido 60 millones de euros de su propio dinero desde 2021.
"La primera es encontrar un socio de última hora. Se nos han acercado muchas personas, pero desgraciadamente no tienen los recursos. Para un inversor que no quiera vender jugadores, la inversión inicial es de 200 millones de euros en los próximos cuatro o cinco años. Si vende jugadores, son 80 millones de euros", explicó.
La segunda opción es la liquidación y la desaparición del club", prosigue López, que insiste en que está haciendo todo lo posible para evitarlo. Por último, está el ejemplo de un rescate al estilo del Estrasburgo, con un paso a divisiones inferiores y una pausa de dos o tres años para reconstruirlo".