La Juventus, al que un tribunal le ha quitado 10 puntos por sus traspasos, es séptimo en la clasificación a falta de una jornada, lo que le sitúa en la competición de bronce tras el verano, pero aún alberga esperanzas de superar a la Roma o a la Atalanta para llegar a la sexta o a la quinta posición.
Para ello tendrían que vencer al Udinese a domicilio el domingo y esperar que alguno de los dos pinche frente a la Spezia y el Monza respectivamente.
"La próxima temporada queremos hacerlo mejor. Mi pasión no está en duda", declaró Allegri en rueda de prensa antes del partido en Udine.
"Por ahora, estamos en la Conference y necesitamos un buen partido en Udine para la Europa League, pero no depende sólo de nosotros", indicó.
"Mis jugadores han hecho un buen trabajo y la próxima temporada será diferente", afirmó. "Tenemos bases sólidas para la próxima temporada y todo problema tiene solución", agregó.
Allegri se ha enfrentado a críticas durante su segundo mandato en la Juve, principalmente debido a la falta de títulos y a su estilo de juego defensivo en los dos últimos años.
"Siempre hay alguien contento y alguien que no lo está. Sucedía incluso cuando ganábamos trofeos", afirmó.
"Esto forma parte del juego, hay que analizar dos temporadas difíciles, pero el fútbol no es una ciencia exacta. Debemos trabajar con serenidad, intentando cometer menos errores. La perfección no existe", apuntó.
"Hay cansancio y rabia, que se sienten cuando no se gana", añadió Allegri. "Si no, te vuelves como los demás y ganar o perder es lo mismo. Debemos llevar esta rabia dentro y plasmarla en el campo", comentó también.
La Juventus concluye la campaña todavía acosada por los problemas de lesiones que le han lastrado durante toda la temporada. "Vlahovic, Bremer, De Sciglio, Fagioli y Pogba no estarán en el encuentro de mañana", dijo Allegri.
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