Dani Olmo, un lustro como internacional absoluto: "Es un sueño hecho realidad"
Dani Olmo (26) es el protagonista de una trayectoria única: tras decir adiós a La Masía, puso rumbo a tierras croatas con el único objetivo de ser futbolista profesional. Ese sueño se fue cumpliendo a fuego lento, a medida que iba acumulando participaciones con el equipo balcánico. Sin embargo, tuvo que esperar a la temporada 2017/18, en la transición a la veintena, para erigirse como un habitual en las alineaciones -sumó nueve goles y debutó en Champions en el siguiente curso-.
Aquellos tiempos quedaron atrás, más si cabe desde que fichó por el RB Leipzig durante el invierno de 2020. En una liga más conocida como la Bundesliga, la popularidad del catalán aumentó. Además, apenas habían transcurrido un par de meses desde su puesta en escena con la Roja, que tuvo lugar en el Nuevo Mirandilla (7-0 a la débil Malta, contra la cual anotó un gol después de sólo 25 minutos sobre el verde). Y en el banquillo local, un tal Robert Moreno.
Desde entonces, cinco años y un total de 40 encuentros: "Es un orgullo y un sueño hecho realidad. Cada partido es una oportunidad de vestir la camiseta de la selección y de representar al país, y lo hago con la misma motivación de ganar que el primer día. Parece que fue ayer, me acuerdo de que jugábamos en Cádiz. Álvaro vino corriendo hacia mí. Un momento único y especial", expresa ante los medios oficiales de la RFEF.
Dani Olmo, "jugador de equipo"
"Había un córner y justo se dio el cambio. El árbitro le dijo que saliera por línea de fondo, él no lo escuchó y se metió un esprint hasta la línea del medio campo porque quería abrazarme. Fue un detalle espectacular y a mí me marcó. Recuerdo que me levantó y me metió adentro", detalla el de Terrassa sobre su incorporación al césped, con Morata actuando ya como un capitán, en un choque correspondiente a la fase de clasificación para la Eurocopa de 2021.
"Me siento bien bajo presión y me gusta jugar entre líneas, detrás del nueve, porque soy asociativo, ofensivo y vertical. También me considero solidario y un jugador de equipo que siempre quiere ganar. Creo que ya me conocen más", se describe a sí mismo el propio Olmo, quien nombra a Leo Messi e Andrés Iniesta como sus referentes y reconoce que llevar el 10 en la espalda -como hicieron Cesc Fàbregas o Thiago Alcántara en el pasado- es "una motivación".
Dani, que no se esconde a la hora de afirmar que ya miran de reojo al Mundial de 2026 y que el "objetivo" es "ir a por lo máximo", presume de vestuario: "La unión es la clave. Fuera del campo somos una familia y amigos todos, nos llevamos muy bien, y eso se refleja sobre el terreno de juego. Adonde no llega uno lo hace el otro. Vamos todos a una y nos entendemos a la perfección. Es un gusto. Jueguen los que jueguen, siempre lo hacemos de la misma manera".