París es una ciudad para disfrutar. Para aprender. Para sufrir… en especial si de fútbol y de Juegos Olímpicos se trata. España vivió en carne propia la oración anterior durante su debut en la cita de París 2024. Japón, un equipo que ya lo había derrotado (y goleado por 4-0) en el Mundial de 2023, volvió a ser un hueso duro de roer.
Las niponas empezaron ganando el partido con un golazo de Aoba Fujino (12’) que cayó como un jarro de agua fría para las dirigidas por Montsé Tomé. España, sin embargo, se repuso de forma rápida de la tragedia y Aitana Bonmatí, con su magia y calidad habitual, puso las tablas con un golazo.
En el segundo tiempo, Japón tuvo la primera y volvió a causar susto en el arco proteguido de Cata Coll. Paredes, más adelante, respondió con otra llegada. En el 52' La Roja pidió penalti por una posible mano de la defensa nipona. Sin embargo, no se decretó infracción.
España sostuvo el ritmo que expuso en el amanecer de la segunda mitad y, después de tanto intentar, se encontró con el 2-1 obra de Mariona Caldentey en el 71'. Mariona definió una excelente parded con Aitana y puso el balón pegado al palo, inalcanzable para la guardameta de Japón.
Como era de esperarse, Japón salió a por todas en el tramo final del partido. Las asiáticas embestían con intensidad mientras que España buscaba dormir el balón con más calma. España, pese a la potencia física de Japón, logró dominar y controlar el partido, cerrando, con esfuerzo, una victoria trabajada en su debut en los Juegos Olímpicos de París 2024.