Pogacar y Evenepoel, puntas de lanza para la próxima temporada tras un 2022 vibrante
Con Wout van Aert, Mathieu van der Poel, Tom Pidcock, el eritreo Biniam Girmay o incluso el ganador del Tour de Francia, Jonas Vingegaard, el ciclismo está reviviendo una edad de oro, después de años de hundimiento por casos de dopaje que, últimamente, solo han tenido réplicas marginales.
Interrogados por la AFP, corredores experimentados y laureados como el británico Geraint Thomas, el francés Romain Bardet o el belga Greg van Avermaet no ocultan sólo su sorpresa sino su admiración también ante estos jóvenes sin complejos que acaparan podios desde el principio hasta el final de la temporada.
De este pelotón de cinco estrellas emergen dos fenómenos que siguen los pasos de leyendas como Eddy Merckx y Bernard Hinault, hasta el punto de que a veces se les atribuye el apodo de "pequeños caníbales".
El primero, Tadej Pogacar, de 24 años, logró dieciséis victorias en 2022, más que ningún otro ciclista, entre las que se encuentran la Strade Bianche, la Tirreno-Adriático, el Gran Premio de Montreal, el Giro de Lombardía y tres etapas del Tour de Francia, competición que acabó en segundo lugar en la clasificación general.
El segundo, Remco Evenepoel, de 22 años, terminó la temporada con 15 triunfos, entre ellos un Monumento (Lieja-Bastoña-Lieja), la Vuelta a España y el Mundial en ruta.
"Bum, bum, bum"
Razias de otro tiempo que impresionan a Greg Van Avermaet, 37 años, campeón olímpico en Rio en 2016: "Hinault o Merckx hacían esto, pero en mi generación era mucho más específico. Cancellara hacía las clásicas y la contrarreloj; Sagan los esprints y las clásicas; y Froome las grandes vueltas. Mientras que aquí tenemos a Pogacar que va rápido, escala y brilla en contrarreloj. Remco lo mismo: es capaz de todo."
Para el veterano belga es una excelente noticia para el atractivo del ciclismo. "Para la gente que ve la televisión es bueno porque son los mismos nombres que siempre aparecen", afirma.
Apóstol de un ciclismo de ataque, Bernard Hinault reconoce los méritos de los jóvenes lobos. "Lo fantástico de los nuevos es que no se hacen preguntas. Bum, bum, bum. Si mantienen este espíritu de atacar a toda velocidad, podremos soñar diez años", señala a la AFP.
Jonas Vingegaard, que aparte de ganar el Tour de Francia sólo brilló en carreras menores y a menudo incluso por su ausencia, también entra a formar parte de este cuadro, pues es el vencedor de la carrera que fagocita el calendario ciclista.
"Listón más alto"
Pero, Vingegaard también supo dar muestras de brillantez en la 'Grande Boucle', sobre todo durante la memorable etapa del Granon en la que atacó sin descanso para destronar a Pogacar.
En la primera línea ese día, Romain Bardet, tercero de la etapa, estaba bien situado para describir al final un "nivel realmente alto". El escalador francés asegura que está más fuerte que en 2016 o 2017, cuando terminó segundo y tercero en el Tour de Francia.
"Progresé, con seguridad, pero los jóvenes que llegaron fijaron el listón aún más alto. Así que mi generación, que debería haber dominado la competición desde 2020, se vio relegada inmediatamente por esta generación fenomenal que irrumpe en todo", subraya.
Geraint Thomas, ganador del Tour en 2019 y tercero este año, considera también que los nuevos son más fuertes que sus predecesores como Chris Froome o Alberto Contador. "El ciclismo", dice, "ha cambiado mucho y estoy contento de formar parte de ello" en compañía de Pogacar y Evenepoel, "dos chicos únicos" que colocan la lucha por encima.
Para deshacer el empate entre los dos fenómenos en la última prueba, el Tour de Francia, habrá que esperar un poco más. Mientras que Pogacar va a hacer todo lo posible para reconquistar su título el próximo verano, Evenepoel ha decidido esperar al menos un año más para descubrir la Grande Bucle, después de haber preferido competir en el Giro de Italia en 2023.