Djokovic, cuarto cabeza de serie, llegó al partido con un notable récord de 9-0 en enfrentamientos directos contra Fritz y subió inmediatamente la presión en el primer juego, obligando al estadounidense a defender con éxito tres puntos de ruptura.
El serbio mantuvo a Fritz contra las cuerdas con sus potentes y precisos golpes de fondo, y utilizó su revés con un efecto devastador, acumulando tres puntos de ruptura más, hasta el 2-2. Fritz sólo fue capaz de rechazar uno antes de enviar su revés fuera. Djokovic aprovechó la rotura del servicio en el siguiente saque y con el 4-2 encarriló la primera manga, que finalizó con 6-4 favorable al balcánico.
El estadounidense cobró impulso en el segundo set después de mantener el saque en un juego ajustado en el que Djokovic realizó una serie de espectaculares passing shots, antes de conseguir sus dos primeras oportunidades de break del partido con 4-3. Djokovic fue capaz de aguantar.
Djokovic fue capaz de aguantar, pero sufrió un problema en la cadera y tuvo que ser atendido en la pista antes de llevar el set al tie-break, donde un desaprovechado Fritz luchó por encajar primeros saques y cedió mansamente el partido, al no poder convertir un punto de set.
Djokovic, 24 veces campeón de Grand Slam, jugará su quinta final en la historia del torneo, en busca de su 100º título ATP y de su quinta corona en el Masters de Shanghai.