La pandemia de coronavirus tuvo un impacto muy negativo en los Juegos Olímpicos de 2021, celebrados con retraso en Japón, y en los Juegos de Invierno de 2022 (en Pekín). No se permitió la presencia de espectadores en Tokio y apenas se permitió en China. Los estrictos protocolos para todos los participantes en los juegos garantizaron que el virus no se propagara.
A Meares, consciente de que la situación es muy distinta, no le preocupa que el virus se propague dentro del equipo porque no se trataría de forma diferente a otros virus como la gripe. "Esto no es Tokio", apuntó.
Según Anna, la deportista afectada "no se encontraba especialmente mal" e incluso estaba entrenando. Sin embargo, está alojada en una habitación individual y "los contactos cercanos están siendo controlados y sometidos a pruebas", continuó.
El COVID-19 ha vuelto a aumentar recientemente en Francia. Hubo varios casos entre los corredores del Tour de Francia y, como respuesta, la organización introdujo la obligación de llevar mascarilla para los representantes de los medios de comunicación en las zonas donde tuvieran contacto con los ciclistas.